Orri Óskarsson aterrizó en el aeropuerto gasteiztarra de Foronda durante la madrugada de este sábado, a la una. Nayef Aguerd, mientras, lo hizo horas más tarde, casi a mediodía, en Biarritz. Ambos se encontraron en el hotel Costa Vasca, cogieron sus cosas y pusieron rumbo a Zubieta para entrenarse, entrar en su primera convocatoria txuri-urdin y subirse de nuevo a un avión, este con destino Madrid. Ni islandés ni marroquí han pasado más de un puñado de horas en Donostia. Y sin embargo se vestirán hoy de corto con motivo del partido que la Real Sociedad disputa en Getafe.

Se cerró el mercado de fichajes. Por fin. Y los de Imanol pueden ya mirar al horizonte despojados de incertidumbre. Ha quedado claro quién ha venido, quiénes se han quedado, y solo toca tirar millas para arreglar un comienzo liguero discreto pero a todas luces subsanable. Han sido tres puntos en tres jornadas, idéntico bagaje que el pasado curso, y entonces el equipo remontó el vuelo para terminar certificando su quinto billete europeo consecutivo. Hablar ahora de objetivos tan lejanos resulta absurdo, pero sería importante escribir hoy la segunda página del libro anunciado en su día por Aperribay. La primera ya quedó redactada en el campo del Espanyol.

Solo tres bajas

Los citados fichajes de Óskarsson y Aguerd han dibujado un panorama según el cual a Imanol le queda una plantilla compuesta por 27 futbolistas. Los 25 dorsales del primer equipo se encuentran cubiertos. Y en la nómina de futbolistas del oriotarra cabe incluir también a Jon Mikel Aramburu y Jon Martín, con ficha del Sanse pero en la dinámica de los mayores. Toda vez que para viajar a Getafe causan baja los lesionados Aritz y Zakharyan, así como el sancionado Oyarzabal, el técnico tenía para esta tarde a hasta 24 futbolistas, circunstancia que le obligaba a hacer al menos un descarte. Y sin embargo hizo dos: para seguir contando con el potrillo Marín, dejó fuera a Urko y a Odriozola.

En lo que respecta al once inicial, no se esperan excesivos cambios respecto a la derrota contra el Alavés. El obligado deja fuera al suspendido Oyarzabal e implicaría el ingreso en el once de Turrientes. El beasaindarra permitiría adelantar a Sergio Gómez al extremo zurdo, y el catalán haría a Becker centrar su posición. En el resto de la escuadra, no debe descartarse que el propio Aguerd ingrese directamente en la alineación, al encontrarse Pacheco algo dolorido aún de la rodilla. El marroquí debutaría formando pareja con un Igor Zubeldia de quien se espera mejoría, física y futbolística, conforme vayamos arrancándole hojas al calendario.


El Getafe, por su parte, espera a los txuri-urdin con su hinchada decepcionada por los acontecimientos vividos con el cierre de mercado. Esperaban más llegadas, pero estas no se han producido y el balance estival es el que es en el Coliseum: trece salidas y ocho fichajes, con el consiguiente déficit de efectivos y la obligación de tirar más que nunca del filial. Esta tarde Bordalás puede contar al menos con delanteros como Mayoral y Yildirim, aunque el centrocampista Uche podría iniciar de nuevo el encuentro en punta. 

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