Mikel Oyarzabal ha reconocido este martes, en vísperas del Real Sociedad-Inter de Milán de la primera jornada de la Champions League, que disputar el máximo torneo europeo significa «un sueño hecho realidad» para él y para la plantilla, aunque esto no quiere decir que el equipo txuri-urdin no vaya a competir la liguilla. «Si nos dan a elegir, todos queremos ganar, pero, si no se puede, el cómo también resulta importante. Nosotros vamos a salir al campo a competir, con mentalidad ganadora, y a partir de ahí los resultados se definen muchas veces en función de detalles puntuales».
El eibartarra ha recordado su primer contacto con la Liga de Campeones, hace diez años en calidad de recogepelotas. «Ya estaba en el club y recuerdo que estuve en la banda en la eliminatoria contra el Lyon. Fue un día de nervios, especial, y este miércoles va a resultar parecido, aunque diferente también», ahora como futbolista. «La aproximación al partido será idéntica a la de todos los demás encuentros. Después, en el campo, con la música y el ambiente, sí que se hará todo un poquito diferente», ha agregado el futbolista.
Preguntado por si encuentros así se juegan con el corazón o con la cabeza, Oyarzabal ha reclamado un compendio de ambos factores. «Será importante percibir ese punto de emotividad que tendrá el partido para salir bien enchufados, a tono con lo que significa el partido. Pero después, sobre el campo, necesitaremos también ese punto de tranquilidad para saber qué tenemos que hacer en cada momento».
En este último sentido, el 10 txuri-urdin no ha querido entrar a analizar qué va a demandar a la Real un equipo como el Inter. «Da igual lo que hagas, porque ellos tienen muy claro cuáles son sus fortalezas y van a tratar de aprovecharlas. Nosotros ya hemos demostrado que somos capaces de competir contra cualquiera, y este encuentro no debería de suponer ninguna excepción. Muchos no hemos jugado en Champions aún, pero sí hemos disputado otros partidos internacionales de mucho nivel, y esas experiencias también nos van a servir. Además, para muchos son ya años en el club, con distintas cosas vividas para llegar hasta aquí, y ese punto adicional de ganas también nos tiene que beneficiar».
Finalmente, el atacante blanquiazul se ha referido a su momento de forma y a las actuaciones que está completando en los últimos encuentros. «Yo estoy tranquilo. A todo el mundo le gustaría jugar mejor de como lo hace, pero estoy dando todo lo que tengo dentro. A partir de ahí, las cosas salen luego mejor o peor, pero tengo el convencimiento de que terminarán llegando».