‘Caso Alogo’: la Diputación refuerza su capacidad para autorizar cambios de categoría

La Diputación sale así al paso (sin citar en la norma foral este caso, ni al jugador ni a los clubes y explicando el proceder general en estas situaciones) de la denuncia realizada por el Antiguoko, después de que Alogo disfrutara del permiso foral para subir de categoría y poder jugar con la Real, acusando al ente foral de “trato de favor” al club txuri-urdin. De hecho, el club antiguotarra hizo un llamamiento para que se dé una “igualdad de trato para todos los equipos” y advirtió de que realizaría un análisis de lo acontecido al “objeto de adoptar las medidas que correspondan”.

La orden foral

De esta manera, la Diputación precisa en la orden foral FA-KG-2023-0531, en su apartado c), cuando se dan situaciones o peticiones de este tipo en jugadores de edad escolar, se “analiza individualizadamente cada caso por el bien del escolar en cuestión y por el de sus compañeros y compañeras de equipo”, según reconocieron a NOTICIAS DE GIPUZKOA fuentes del Departamento de Cultura, Cooperación, Juventud y Deportes.

Asimismo, en el caso de cambio de categoría (no sólo en el fútbol, sino también en otros deportes), estos se llevan a cabo atendiendo a “los programas de tecnificación de las diversas modalidades deportivas en edades de segundo año de alevín en adelante”. Cabe recordar que los y las menores tienen licencia escolar mayoritariamente hasta la categoría infantil.

De cualquier modo, hay que dejar claro que la Diputación no ha realizado, a raíz de este caso, ningún cambio en la normativa que regula el Deporte Escolar en lo que tiene que ver con la emisión de licencias o atención al talento deportivo, sino que esta forma de proceder ya estaba tipificada con anterioridad.

‘Guerra’ entre la Real y el Athletic

Alfredo Alogo se puso en boca de todos en el ámbito futbolístico desde que el Athletic, a través de los cuatro ojeadores que tiene en Gipuzkoa, se fijara en este jugador de 12 años que antes de recalar en el Mariño pasó por el Lengokoak, y presentara a su familia una de esas ofertas que se califican de irrechazables para que se incorpore a Lezama el próximo verano. Ante la probable fuga del, según los que conocen el fútbol base, mayor talento de la categoría, la Real reaccionó y lleva tiempo tratando de convencer a sus padres de que lo mejor para el chaval es seguir en su entorno para recalar en Zubieta cuando llegue el momento oportuno. Hasta el punto de que incluso, como hemos mencionado, ya ha debutado con la camiseta txuri-urdin al jugar el pasado 28 de abril el partido de la fase campeones infantil que la Real disputó en Zubieta contra el Antiguoko (1-2). Un estreno que provocó el malestar del propio club antiguotarra, tal y como hemos explicado.

No obstante, Zubieta no fue, el día de su estreno con la Real, un centro desconocido para Alogo, ya que en Semana Santa ya participó como txuri-urdin en uno de los torneos que se organizan en este periodo. Lo cierto es que el jovencísimo jugador, que también acude a Anoeta ataviado de la zamarra blanquiazul, prefiere quedarse con su familia y jugar con la Real, pero hay que ver cómo se resuelve el contrato que tienen suscrito sus progenitores con el Athletic.

Las demás instituciones

Con la publicación de esta norma foral en el BOG la Diputación deja claro cuál es el procedimiento cuando se dan estos casos pese a que surjan voces discordantes como las del Antiguoko, que en el comunicado que hizo público hace dos semanas se expresó de manera contundente: “Debemos manifestar nuestra sorpresa y estupor ante esta nueva acción llevada a cabo por la Diputación Foral de Gipuzkoa y, sobre todo, nuestro rechazo a una conducta aparentemente arbitraria, atentatoria de la norma, del principio constitucional de igualdad y de la libre competencia”.

Más tarde, la Federación Guipuzcoana de Fútbol quiso mostrar su preocupación por el cariz que estaban tomando los acontecimientos en un asunto tan delicado: “Esta Federación asiste horrorizada a la sucesión de los acontecimientos y hace un llamamiento para que, de una vez por todas, se permita al menor continuar con su vida habitual sin tener que estar sometido a semejante presión externa”. Ahora, al menos, el tema que concierne al caso Alogo y situaciones similares que afectan al fútbol de estas edades está algo más claro.